En esta Cuaresma, a comer pescados y mariscos
En esta vigilia, en la que no se come carne roja, hay infinidad de opciones gastronómicas. Los alimentos del mar son una gran alternativa para comer y disfrutar
POR MARICHUY GARDUÑO/ FOTOS: CORTESÍA
Llegó la Cuaresma, la mejor temporada para probar los platillos que se pueden elaborar con los productos que ofrece el mar. Según el Diccionario de la Real Academia; Cuaresma es el tiempo de cuarenta y seis días que desde el miércoles de ceniza preceden a la festividad de la Resurrección de Jesucristo, y en el cual la Iglesia preceptúa que se ayune ciertos días en memoria de los cuarenta que ayunó Dios en el desierto.
Se trata de una época del año en la que por motivos religiosos, determinada comunidad (en este caso la católica) evita el consumo de determinado tipo de alimento.
En el texto La Cocina Veracruzana de Cuaresma, editado por los Cuadernos de Cultura Popular del Instituto Veracruzano de Cultura, se menciona que si el ayuno de Cristo fue total, el de los cristianos no lo es precisamente. A lo largo de dos siglos, la privación de alimentos, para purificar el espíritu e identificarse con la abstinencia de Jesucristo en el desierto, se convirtió en la abstinencia sólo de algunos alimentos, como es el caso de las carnes rojas.
“La carne de los animales terrestres cedió su lugar a la de los pescados, sean de agua dulce o salada, y a la de los mariscos.
“Cada año, durante la Cuaresma, las legumbres secas y las verduras presiden las mesas de los creyentes. De esta manera se fue conformando un tipo de comida ritual que más allá de las celebraciones eclesiásticas, envuelve la cotidianidad de la vida”, se argumenta en el texto de la Cocina Veracruzana de Cuaresma.
María Mestayer de Echagüe, explica en el libro Historia de la Gastronomía que, antiguamente se ayunaba los miércoles y viernes de todo el año; después fueron los miércoles y sábados, poco a poco la Iglesia fue menos rigurosa. Hoy en día la vigilia se ha reducido y dulcificado de tal modo que casi no resulta un sacrificio.
EL AYUNO EN EL MUNDO
En todas las culturas se establece una relación entre el culto religioso y la alimentación, de una u otra manera. Así, por ejemplo, los musulmanes tienen prohibido tomar bebidas alcohólicas, mientras los judíos se privan de la carne de cerdo, y aún más, algunos de ellos sólo consumen la de los animales sacrificados de una manera ritual.
La historiadora María Mestayer de Echagüe, dice que por su parte, los hindúes no comen la carne de las vacas. Prohibiciones como ésta dieron pie a que en la España medieval, los cristianos viejos se reconocieran por la manera de alimentarse.
“La Conquista española importó al Nuevo Mundo la religión cristiana y con ella sus fiestas, su rito y sus rituales. La Cuaresma se guardó en la Nueva España con el mismo celo con en que se respetaba en la península Ibérica, sólo que la comida se modifica adaptándose a los productos autóctonos y los gustos criollos y mestizos”, puntualiza Mestayer.
