El famoso restaurante de cocina mexicana festeja tres años de éxitos, al ser uno de los favoritos de comensales nacionales e internacionales

Texto: Karla Pineda Román / Fotos: Bertha Herrera

El restaurante Chapulín, favorito de los paladares más exigentes tanto nacionales como extranjeros, está de manteles largos, ya que celebró su tercer aniversario, tiempo en el que se ha consolidado como un referente de la cocina mexicana, eso sí, resaltando el toque y la sazón de Josefina López Méndez, chef ejecutiva.

Ubicado dentro del hotel Presidente Intercontinental México, en Polanco, previo a festejar los éxitos de este feudo y disfrutar algunos de sus platillos más destacados, los asistentes asistieron a un coctel y presenciaron la inauguración del tradicional altar de muertos que se monta en el lobby del hotel. Este año, le rindieron un homenaje a las leyendas del rock, de quienes se observó su calavera y fotografía.

Después de apreciar el gran diseño y arte plasmado en la elaboración de cada calavera y el altar en general, los invitados se dirigieron a Chapulín, donde fueron recibidos cálidamente, como ya es una costumbre de este espacio.

CENA Y FESTEJO 

Lo primero que llamó la atención de los presentes fue que los meseros tenían el rostro maquillado como calaveras, un trabajo bien logrado y agradable, mención aparte merece la chef Josefina, quien era una bella calavera. Sin duda, esta caracterización fue idónea de la temporada, de dar inicio a los festejos del Día de Muertos y por supuesto, el tercer aniversario de Chapulín.

Para esta cena de aniversario, la chef Josefina hizo gala de su gran dominio en los fogones, al ofrecer un menú de cinco tiempos, que incluía algunos de los platos más representativos del lugar.

La velada empezó con flores rellenas de requesón con miel y salsa de calabaza, seguidas de un tiradito de totoaba marinado con limón y chile serrano, pepino y jitomate cherry.

Posteriormente, una carne en su jugo, estofada con tocino y frijoles de olla; en cuanto a platos fuertes se sirvieron intercalados entre los invitados un pescado zarandeado, en mojo de chiles secos, ensalada de quelites y maíz cacahuazintle, o bien un zacahuil con mole negro, pollo, berros, quelites y eneldo, sin duda, cada platillo espectacular, con un balance de sabores, texturas y aromas increíble.

Para concluir, presentaron dos postres, un pastel de tres leches – de almendras, soya y coco -, con frutos rojos compotados con vainilla de Papantla o un biscocho de violetas acompañado con nieve de yaka.

Sin duda, fue una velada muy especial, donde amigos se reunieron para celebrar y brindar por los logros de Chapulín, uno de los restaurantes favoritos de la Ciudad de México.