Grace De La Serie Food Street De Netflix

Innovación en los negocios gastronómicos

Grace, una emprendedora que amplió la cadena de comercialización del negocio familiar con tradición, historia basada en la serie Street Food Asia de Netflix

POR RODRIGO LLANES

Grace de la serie Food Street Asia de Netflix

Grace de la serie Food Street Asia de Netflix

Taiwán es un país con una cultura singular, pues se trata de una tradición china desdibujada por la modernidad impuesta en el siglo XX. Es por ello que sus habitantes desdeñan la historia y el pasado y buscan una proyección al futuro. El conflicto entre generaciones es muy intenso, pues cada una de ellas ha forjado su propio futuro sin la necesidad de una tradición fuerte. En la gastronomía eso es muy claro, pues los platillos más tradicionales son invenciones de los puestos callejeros que alimentan a millones de personas diarias. La mayoría de las casas no cuentan con una cocina equipada con utensilios suficientes para cocinar el amplio repertorio de las cocinas públicas, y los habitantes prefieren comer en la calle donde además conviven con los vecinos de sus barrios.

Por estas condiciones sociales el negocio de la comida es generalmente próspero, pues la demanda es constante y muy amplia. Destacar en el medio gastronómico taiwanés implica romper con la inercia de un mercado muy estable. Los establecimientos tienen garantizada una clientela pero no pueden variar mucho su oferta y sus precios. Por ello la innovación gastronómica se da en los procesos productivos y sobre todo en la cadena de comercialización. Ese es el caso de Grace, una mujer que trabaja en el negocio familiar de comida.

 

Grace de la serie Food Street Asia de Netflix

El esfuerzo de sus padres le permitió estudiar en la capital de Taiwán y dejar su ciudad natal de Chiayi. Se matriculó en turismo y acabó su ciclo. Y a pesar de que pensó en quedarse en la gran ciudad, finalmente decidió volver a su hogar.

Salir del entorno familiar y de su barrio le abrió la visión de las cosas. Ahora tenía una formación profesional y quería ponerla a prueba. Y se involucró totalmente en el puesto familiar. Trató de introducir mejoras a los procesos y tecnología, como un punto de venta con software de administración y una lavavajillas. Pero sus padres se opusieron. Habían logrado sobrevivir tantos años sin esos soportes que veían inútil gastar dinero en algo así.

La confrontación entre generaciones se hizo evidente. ¿Quién tenía razón? Al parecer ambos lados. Los padres conocían bien su negocio por años y no estaban en crisis. Y ella, después de estudiar, sabía que habían grandes áreas de oportunidad para el negocio. Ella trató de innovar a contracorriente. El pleito familiar fue mayúsculo. Parecía que no había nada que pudiera hacer. Pero su ingenio e intuición la llevaron a encontrar un camino para desplegar sus planes sin chocar con sus padres. Ellos que ya eran prósperos, viajaban continuamente de vacaciones confiaban en ella y en sus empleados. Y ella aprovechaba esas ausencias del yugo paternal y maternal para cambiar las cosas. Cuando ellos regresaban, se encontraban con una serie de mejoras que terminaron por aceptar. El proceso llevó varios años.

Finalmente Grace logró una modernización en la cadena de suministros y distribución de su comida que potenciaron las ventas del negocio familiar. Implementó el sistema de cobranza con control de software. Eso le permitió llevar un cuidado minucioso del dinero. Y así se arriesgó a vender más. Implementó el método de entrega de comidas a domicilio. Y para ello abrió su página web para recibir pedidos. En un momento tuvo conflictos con su madre por ello, ya que ella vendía en el puesto la comida para llevar. Pero finalmente Grace capacitó a su personal para llevar un trabajo ordenado y cumpliendo los requerimientos de los clientes. Durante todos esos años mejoró la cadena de suministros para tener los mejores ingredientes y en las condiciones idóneas para su trabajo. Cambió la imagen tradicional y vieja del negocio familiar a la de un negocio próspero con logotipo y diseño en sus locales.

Después de muchos años de tener un solo local el negocio abrió sucursales. Los cambios se programaron cíclicamente con las vacaciones de sus padres. Aprendió a dominar su carácter a través de la religión y la confianza en un poder superior. Hoy en día el negocio de familia sirve 5,000 comidas diarias y ella aspira a que la comida de su ciudad quede en la memoria colectiva de su país como una comida sabrosa y que da identidad.

Este caso nos lleva a plantear los siguientes puntos:

  1. Los productos exitosos siempre venderán más. Por lo que es muy importante asegurar la cadena completa que garantice abasto, producción eficiente, distribución y venta. Además de promoción y posicionamiento de la marca en un ciclo virtuoso y con crecimiento sostenido.
  2. Se debe armonizar las ventas con el suministro y la producción. Un incremento súbito que no esté soportado en estas dos puede ser fatal para el negocio.
  3. Los productos estrella pueden ayudar a promocionar otros y así diversificar la oferta.
  4. Las herramientas tecnológicas son un gran soporte cuando las ventas se incrementan.
  5. ¿Está lista tu cadena de suministro y distribución para soportar más ventas?

Chef e historiador Rodrigo Llanes

Rodrigo Llanes es chef e historiador. Actualmente dirige la Escuela de Oficios Gastronómicos del Goloso Mestizo y de la incubadora de empresas gastronómicas Cooking Impact en el Centro Histórico de la Ciudad de México.

Es autor de varios libros y articulista en varios medios digitales e impresos. En 2017 creó el proyecto Los 300 platos de Moctezuma, en el que junto a un colectivo de chefs, diseñadores e investigadores rescataron la forma ancestral de comer del emperador azteca.

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