La Santísima Mesa, campaña con buen sabor
La Santísima Trinidad, bodega de vinos en San Miguel de Allende, realizó una gran comilona en el centro de de la ciudad en la que se degustaron 5 vinos
TEXTO Y FOTOS: BERTHA HERRERA
Aldama, una de las calles más bonitas del centro de San Miguel de Allende fue cerrada para dar pie al gran evento “La Santísima Mesa” en el que se montó una gran mesa que abarcó toda la calle, en ella 130 comensales pudieron degustar 5 vinos de la bodega La Santísima Trinidad, 5 tiempos preparados por el chef Alessandro Bellingeri, quién ha trabajado en varios restaurantes con estrellas Michelin en Italia y España.
Entre los invitados estaban hoteleros, restauranteros, chefs, artistas, diseñadores y personalidades que viven en San Miguel de Allende, algunos de ellos se unieron a la campaña #SomosSanMiguel, como Alberto Laposse, fundador de Levain & Co Cumpanio. Bryan Sneed, restaurantero y director del Quince Rooftop; el rejoneador José María Fuentes; Donnie Masterton, chef y propietario de The Restaurant; el artista Jaime Shelley; Sharon Martens y Cecilio Garza, dueños de la galería Namuh; los músicos Severo Barrera y Federico Azuz; Nicole y Rafael Lavista campeones nacionales de la disciplina ecuestre Dressage y el arquitecto Roberto Burillo. Personalidades con gran talento, que hacen que San Miguel de Allende sea un destino único, y quienes participaron en los videos de la campaña de La Santísima Trinidad, los cuales fueron realizados por Patricia y Erik Zavala, famosos cineastas quienes también viven en esta hermosa ciudad. También formaron parte de esta difusión La Cañada de la Virgen que es un rancho con ganado de libre pastoreo, así como el Club de Polo La Santísima Trinidad.
EL FESTÍN EN LA CALLE
Chef Alessandro Bellingeri y la enóloga Mailén Obón
La comida fue todo un regocijo en el que como primer tiempo se degustó un wafer salado con estofado de rabo de ternera, pasta frita con jitomate y un arancino de arroz, camarones, berenjena y mozzarella maridado con un vino blanco, un ensamble de uvas 60% Chardonnay, 20% Macabeo y 20% Moscatel.
Paccheri con sardina ahumada
Como segundo tiempo sirvieron un Pacheri con sardina ahumada, crema de papas y limón el cual se acompaño con un Crianza 2018, con seis meses en barrica americana, un blend con 64% Malbec, 25% Cabernet Sauvignon y 11% Syrah.
Lechón crujiente con crema de manzanas.
El tercer tiempo fue un exquisito lechón crujiente con crema de manzanas, castañas y repollo estofado con este platillo se sirvieron dos vinos un Cabernet Sauvignon Gran Reserva 2017 con 12 meses en barrica americana y un Petit Verdot Gran Reserva 2017 con 20 meses en barrica americana.
El cuarto tiempo fue una panna cotta de café, tierra de chocolate y mouse de caramelo salado, el cual casó muy bien con un Merlot Reserva 2017 con 12 meses en barrica.
Por último el quinto tiempo fue un panettone de albaricoque y chocolate blanco que se acompaño con un café Nespresso.
VINOS LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Cava viñedo San Lucas
Son vinos expresivos y elegantes que se producen en el corredor que va de San Miguel de Allende a Dolores Hidalgo, se conforman en tres viñedos: La Santísima Trinidad, Viñedos San Lucas y Viñedos San Francisco, los cuales se encuentran en una región privilegiada por el clima, lo que permite que se den las condiciones ideales para el cultivo de la vid.
La enóloga Mailén Obón cuida todos los detalles para la manufactura del vino logrando que estos sean honestos, con estructura, vinos de colección que pueden guardarse y tomarse en el mejor momento.
Estos viñedos han marcado un estilo de vida ya que manejan un fascinante concepto que cuenta con hotel boutique, restaurantes, cancha de polo, alberca, taller de olivo y de lavanda, además de los viñedos y la vinícola. También la gente interesada puede comprar una parcela, construir su casa y hacerse socio de los viñedos.
Hospedarse en La Santísima Trinidad es como estar en un viñedo en la Toscana, se divisan las viñas, los cipreses, la lavanda, los olivos y si a esto se aúna la comida y el vino por supuesto, es vivir una experiencia única con total armonía, ya que todos los detalles son finamente cuidados con gusto delicado.
Vivir y disfrutar toda la experiencia que ofrecen los vinos La Santísima Trinidad es reconfortante. ¡Enhorabuena!
